Todos sabemos que de una u otra manera el ser humano es capaz de cometer errores.
El Apóstol Pablo quizás el más grande hombre de Dios en la Biblia, lo dice de esta manera:
Romanos 7:17 De manera que ya no soy yo quien hace aquello, sino el pecado (hamartia) que mora en mí.
18 Y yo sé que en mí, esto es, en mi carne, no mora el bien; porque el querer el bien está en mí, pero no el hacerlo.
19 Porque no hago el bien que quiero, sino el mal que no quiero, eso hago.
20 Y si hago lo que no quiero, ya no lo hago yo, sino el pecado (hamartia) que mora en mí.
21 Así que, queriendo yo hacer el bien, hallo esta ley: que el mal está en mí.
La hamartia de término deriva del griego ἁμαρτία, de ἁμαρτάνειν hamartánein, que significa “perder la marca” o “errar al blanco”
Se asocia más a menudo con la tragedia griega, aunque también se utiliza en la teología cristiana.
Hamartia lo que respecta a la literatura dramática fue utilizado por primera vez por Aristóteles en su poética.
Hamartia se entiende comúnmente para referirse al error o falla que conduce a una cadena de acciones de la trama que culmina en un cambio que como protagonista da su fortuna. Puede incluir un error de juicio, ignorancia, un defecto de carácter, o como se lo conoce en el cristianismo como pecado. Este significado ha invitado al debate entre los críticos y estudiosos y diversas interpretaciones entre los dramaturgos. Hamartia se utiliza también en la teología cristiana debido a su uso en la Septuaginta y del nuevo testamento. El hebreo (chatá) y su griego equivalente (àµaρtίa/hamartía) significan “faltar a la marca” o “fuera de la marca”.
El Apóstol Pablo menciona las obras de la carne o sea de la naturaleza humana y dice: Romanos 7:19 Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, 20 idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, 21 envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios. En la práctica del futbol o soccer como se le conoce, errar un penal puede llevar al equipo a perder un campeonato. Esto le sucedió al mejor jugador del mundo Lio Messi. No equivale errar un penal la descalificación de seguir siendo el mejor jugador del planeta, pero eso perjudicó a su equipo. Lo mismo ocurre en nuestro medio, cuando alguien comete “Hamartia” no solo sale dañado uno sino los que están a su lado. En un mundo donde la obesidad se ha convertido en uno de los mayores problemas de salud en la mayor parte de los países, la mayoría de las personas intentan adelgazar, y en muchos de estos casos se cometen errores que evitan obtener resultados.
Ejemplo: Los carbohidratos son la principal fuente de energía y jamás deben ser excluidos completamente de un plan saludable de alimentación pero muchos omiten en usarlos. Existen errores que se cometen cuando uno está frente a un cliente. Ejemplo: Adoptar una actitud de complacencia consigo mismo sin realizar criticas de su propia actuación. Otros errores son los que se producen en el trabajo. Por ejemplo las personas que tienen problemas con las drogas o el alcohol y desean dejarlo, tienen una probabilidad de éxito mucho mayor cuando reconocen, admiten, aceptan y corrigen su comportamiento contraproducente. No puedes salir adelante o alcanzar tus metas, si te desvías de ellas debido a tus propios comportamientos negativos.
También las mujeres cometen muchos errores. Ejemplo: “Ser un libro abierto” Este es probablemente el peor error. Un poco de misterio es una buena manera de hacer que el interés de un hombre dure. Las mujeres no deben dejar de compartir sus sentimientos con el hombre que les gusta. Sin embargo, usted debe tener un poco (o mucha) moderación y no compartir toda su historia de inmediato. No nada de malo en estar interesada en un hombre pero, si es muy obvia no sólo es de mal gusto sino, también hace que el hombre pierda interés rápidamente. El misterio genera una gran cantidad de emoción para un hombre durante la fase inicial de una relación. También las mujeres cometen errores sexuales en el matrimonio. Ejemplo: “No entender como piensa su marido” La caída de Adán exageró los deseos naturales sexuales masculinos, pero no es lascivia ni bajos instintos, que el hombre sienta un deseo por su esposa todos los días del año, 24 horas al día. (OBVIO, POR SU ESPOSA SOLAMENTE) Tampoco se trata de que la mujer sea esclava sexual de su marido en el matrimonio, lo que trato de decir es que el hombre precisa que su mujer entienda su necesidad de hombre con respecto a una vida sexual más activa.
No obstante, el ser masculino por más cristiano y por más que lea la Biblia, así será siempre, porque así fue creado…reproducción es su prioridad física numero #1 le moleste a quien le moleste. 100 % comprobado.
Así que, si su marido nada mas la ve a usted, su esposa, sola, y le entra lo cariñoso aun olvidándose de los problemas y de que la ofendió hace unos minutos, no es que sea un “viejo lascivioso”.
No… es un hombre normal.
Dele gracias a Dios de que siente deseo por usted y no anda buscando por otro lado…por favor, pobrecito su marido, no lo rechace.
Pablo, el Apóstol anima a que llevemos una vida en el Espíritu, eso sí, no olvidando la “Hamartia” que está dentro de nosotros y que solo va a cambiar cuando nuestro cuerpo sea glorificado. Gálatas 5:25 Si vivimos por el Espíritu, andemos también por el Espíritu. 26 No nos hagamos vanagloriosos, irritándonos unos a otros, envidiándonos unos a otros.